
Hoy os traigo otra receta de mermelada casera. Y es que esto de hacer mermeladas engancha. ¡Es tan fácil! ¡Y están tan ricas! Además, nos da la oportunidad de probar mermeladas que nos son tan fáciles de encontrar en las tiendas, como la mermelada de mandarina o esta mermelada de pera. Pero incluso una mermelada tan común como la mermelada de fresa merece la pena hacerla en casa, ya que el sabor no tiene nada que ver. Además, podemos hacer mermeladas agridulces, como la mermelada de pimientos del piquillo que os traje el otro día.
Como siempre, os voy a dar las cantidades para que os salga un tarro de
tamaño mediano, que podéis conservar sin problemas de una semana a diez
días en la nevera.
Si queréis hacer más cantidad, para hacer conservas caseras, simplemente
tenéis que aumentar las cantidades de ingredientes proporcionalmente. Y
AQUÍ podéis ver cómo hacer las conservas caseras de mermelada y las precauciones que debéis tener.
INGREDIENTES
- 1/2 kg de peras
- Azúcar
- El zumo de medio limón
PREPARACIÓN
Lavamos y pelamos las peras. Cortamos la pulpa en trozos y añadimos el zumo de medio limón. Lo pesamos y añadimos la mitad del peso resultante en azúcar. Por ejemplo, si la pera con el limón pesa 400 gr, añadimos 200 gr de azúcar.
Lo ponemos en una cazuela metálica, removemos bien, tapamos y dejamos macerar media hora.
Pasada esa media hora, ponemos la cacerola destapada a fuego fuerte y
llevamos a ebullición. Después, continuamos la ebullición (que haga
"chup-chup") a fuego lento de 20 a 30 minutos, hasta que se espese lo
suficiente. Iremos removiendo de vez en cuando con una cuchara de
madera.
La mermelada de pera sí vamos a tener que triturarla, ya que no se va a deshacer lo suficiente como para coger textura de mermelada. Así que esperamos a que se enfríe un poco (para no quemarnos) y la trituramos.
Si alguna vez nos ocurre que, al enfriarse, nos damos cuenta de que la mermelada nos ha quedado dura,
¡que no cunda el pánico! Tiene arreglo. Sólo tenemos que volver a
ponerla en una cacerola y le añadimos un poco de agua. Removemos bien (primero a fuego fuerte, y cuando
hierva bajamos el fuego), hasta que quede todo integrado. Retiramos del
fuego y dejamos enfriar otra vez. Quedará perfecta.
Una vez enfriada la mermelada a temperatura ambiente, la metemos en un bote de cristal, bien cerrado, y... ¡al frigorífico!
Besitos y... ¡hasta el próximo post!
Que buena pintaaaaaa y se ve facil! ;) Bscosss
ResponderEliminarummm que rica no hay nada mejor que mermeladas caseras bssss
ResponderEliminarohhh que buena te ha quedado, me encantan estas mermeladas, genial!
ResponderEliminarQué delicia Carmen, te quedó una mermelada exquisita, con una textura espectacular!!
ResponderEliminarMe encanta!!
Un besito
Gracias por tu visita y por quedarte :D yo también me quedo por aquí!y me apunto la receta de la mermelada de pera que nunca la he probado!
ResponderEliminarUn beso
Blue Velvet Cook Book
Hola llegue a tu blog. de casualidad y me quedo de seguidora para ver tus recetas. la mermelada exquisita.
ResponderEliminarsaludos. cocinando con cintro. -))
Me encanta la receta, yo la preparé este verano y la he utilizado mucho para acompañar patés y aperitivos salados. Muchos besitos
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